En 1838 varios cerveceros de la
localidad de Plzen se asociaron para producir una cerveza de calidad, lejos de
las cervezas que se producían en la época que eran turbias, oscuras y espesas.
Tenían un aspecto tan poco apetecible que nunca se servían en vasos transparentes.
Estos cerveceros contrataron al
arquitecto Martin Stelzer, que decidió construir la fábrica a las afueras de la
ciudad, junto al río Radbuza. Era una zona de roca arenisca que permitía hacer
túneles con más facilidad y era rica en acuíferos.
También contrataron al cervecero bávaro Josef Groll que introdujo la baja fermentación (estilo lager) haciendo excavar túneles subterráneos para poder fermentar la cerveza en frío, y así poder racionalizar dicha fermentación al controlar la temperatura. Además seleccionó materias primas de primera calidad como la cebada de Moravia y el lúpulo de Saaz, e introdujo las calderas de cobre que se calientan al fuego para caramelizar la malta durante la cocción.
Fábrica Plzensky Prazdroj
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También contrataron al cervecero bávaro Josef Groll que introdujo la baja fermentación (estilo lager) haciendo excavar túneles subterráneos para poder fermentar la cerveza en frío, y así poder racionalizar dicha fermentación al controlar la temperatura. Además seleccionó materias primas de primera calidad como la cebada de Moravia y el lúpulo de Saaz, e introdujo las calderas de cobre que se calientan al fuego para caramelizar la malta durante la cocción.
Gracias a todas estas novedades, el
4 de octubre de 1842 se presentó en el mercado de San Martín la primera cerveza
dorada. Nacía la Pilsner, la primera cerveza lager dorada o rubia de baja
fermentación. En 1898, debido al éxito que tuvieron y a los imitadores que le
surgieron, la cerveza se rebautizó con el nombre Pilsner Urquell (Plzenský
prazdroj), “la Pilsner de la fuente original”.
Hoy en día, la cervecera Pilsner
Urquell forma parte de SABMiller, segunda cervecera del mundo detrás de Inbev. En
esta fábrica también se fabrica la cerveza Gambrinus. La fábrica consta de un
museo, una tienda de souvenirs, una cervecería y un restaurante dónde incluso
se celebran bodas, algo bastante común porque esta fábrica es un orgullo
nacional en la República Checa.
Se pueden hacer visitas guiadas a
la fábrica dónde te muestran la fábrica de embotellado moderna, las antiguas
calderas, y se recorre un tramo de los 9 km de túneles subterráneos. Dura una
hora y media, y la entrada general vale 6€ (3,2€ estudiantes, etc). La visita
puede ser en checo, ingles o alemán según la hora que se elija. Para grupos de
10, y previa reserva, hay visitas guiadas en castellano. Al final de la visita te sirven,
de unos de los barriles que están en los túneles, una cerveza pilsner sin
filtrar.
Dirección: U
Prazdroje 7, Plzen
Horario:
Abril-Septiembre 08:00-18:00
Octubre-Marzo 08:00-17:00
Horario
visitas: (confirmar en la página web)
En checo:
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Lunes - Domingo
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12:30, 14:00, 16:00
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En ingles:
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Lunes - Domingo
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12:45, 14:15, 16:15
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En alemán:
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Lunes – Viernes
Sábado - Domingo
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14:30
13:00, 14:30
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