Inaugurado el 13 de julio de 1986
a las 13 horas y 13 minutos por Juan Barranco, alcalde de Madrid en aquel
momento, el Dolmen de Dalí es el único monumento urbano del mundo en el que
participó directamente el genial artista Salvador Dalí (1904-1989).
El Dolmen de Dalí |
El proyecto se inició el 13 de
mayo de 1985 cuando Tierno Galván, alcalde de Madrid, encoló personalmente el
primer cartel de la exposición ¡Viva la Gala!, exposición en recuerdo a la difunta musa del pintor. Este gesto emocionó tanto
a Dalí que regaló a Tierno Galván un bastón que había sido propiedad de Victor
Hugo. Fue entonces cuando el alcalde de Madrid decidió dedicar en la capital de
España una plaza a Dalí.
El 25 de julio de 1985 se realizó
en Port Lligat la primera reunión entre Dalí y una delegación de técnicos del
Ayuntamiento de Madrid. Dalí, delicado de salud, sabía exactamente lo que
quería pero se necesitaron diez reuniones para acabar perfilando el proyecto.
El pintor buscaba realizar un monumento en homenaje a la ciencia y a la técnica
como expresión de los máximos logros de la Humanidad. Para ello utilizó la
figura de Isaac Newton, científico descubridor de la Ley de la Gravedad, y un
dolmen, primer intento de los humanos en desafiar la gravedad. La firma del
artista en dos bocetos presentados por los técnicos del Ayuntamiento, y la
reunión celebrada entre Dalí y Tierno Galván en la Torre Galatea y sellada con
dos besos en la frente, confirmaron la realización del proyecto con el
beneplácito del pintor. En el monumento participaron directamente los
arquitectos A. Güemes y E. Esteras y el ingeniero J. Jiménez Cañas.
La escultura de bronce patinado
en negro de casi tres metros y medio de altura representa a un hombre con un
péndulo esférico en la mano, una clara alusión a Isaac Newton y a su Ley de la
Gravedad. La escultura descansa sobre un pedestal de granito donde se puede
leer grabadas las letras que forman el nombre de GALA. Es una réplica de una
escultura creada en 1969 y titulada Homenaje a Newton que encontramos en el
Museo de Figueres, a la vez copiada de un cuadro del artista, Fosfono de Laporte, realizado en 1932
como homenaje al científico Gianbattista della Porta (1535-1615).
Detrás de la escultura
encontramos un dolmen que mide 13 metros y 13 centímetros. Son tres pilares de
granitos tallados y encima una roca natural. El monumento también contaba con
un pavimento original que fue sustituido en el 2003.
Después de un incendio en el
Palacio de los Deportes en septiembre de 2002, el alcalde Álvarez del Manzano
decidió que el arquitecto Patxi Mangado reformara la plaza. Se sustituiría el
pavimento, se quitaría el pedestal, se trasladaría el dolmen al parque de la
Fuente del Berro y la escultura se desplazaría al oeste. La oposición vecinal y
los tribunales frenaron el proyecto aunque el pavimento se cambió y a día de
hoy se sigue luchando para recuperar el original.
Dirección: cruce de Av. Felipe II
y C/ Antonia Mercé
Cómo llegar: Metro Línea 2 y 4:
parada Goya
Autobús nº26; nº28;
nº29; nº30; nº56; nº60
Horario: Todo el día
Precio: Gratis
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